Una llega a ser lo que su alrededor le alienta a conseguir. Por eso, en un día como el de hoy, que realmente conmemora el feminismo y que todo esfuerzo tiene su recompensa, que un granito de arena tras otro componen una montaña, que las desigualdades (en cualquiera de sus estadios) son ridículas, que no debería celebrarse un día especialmente dedicado a la mujer y, aún menos, a la fémina que trabaja como algo excepcional (pero no queda más remedio)…
Decía… en un 8 de marzo, que realmente recuerda aquellas primeras mujeres que lucharon para que hoy suene anacrónico, casposo, obsoleto, irrisorio y otros muchos calificativos el plantearse cuestiones como el derecho al voto de la mujer, por ejemplo, o la obligatoriedad de sueldos correlativos con el puesto de trabajo y no ligados a la condición sexual (porque esto se ha superado también, ¿verdad? ;))… en días así, no puedo sino pensar en esas mujeres que me han hecho la vida más fácil, que se han erigido como modelos a los que seguir, que han marcado mis pasos y me han inspirado como persona, profesional, amiga o hermana de sangre.
Siendo radicalmente distintas, quiero verme reflejada en pequeños detalles de cada una de ellas, en su tenacidad y fuerza para desarrollarse independientemente, en su ternura y empatía con aquello que les rodea, en su arrojo y carácter para salir adelante en las circunstancias más delicadas, en su habilidad para sonreír y tomarse con humor los desaires de la vida. Seguro que me quedo corta en lo que sus aportaciones han significado para mí.
Para estar a su altura, hay que subir muchas escaleras. Ellas siempre han sido, son y serán mi motivación, mi motor de vida. Y de ellas seguiré aprendiendo, porque tengo la suerte de, aun en la distancia física y real, contar con su apoyo incondicional pase lo que pase. Me siento muy afortunada de haberme criado en una familia matriarcal donde brillan mujeres valientes hechas de la mejor madera.
Yo quiero ser como ellas. Y espero, algún día, ser una de ellas.
Este es mi pequeño homenaje a vosotras. Gracias :)
Para ser GRANDE solo se necesita SER MUJER …
Inma, me pasa igual que a ti. El legado con el que me han obsequiado las mujeres de mi familia, me llena de orgullo y admiración, por lo que no puedo más que, como mínimo, tratar de igualarlo :-)
Gracias por el post!
Que bellas palabras!!!
Cielo sin palabras me has hecho llorar y sentirme muy orgullosa d ti gracias por incluirme en las mujeres d tu vida para mi es un grandísimo honor!!