Cuando vi a Alicia Méndez poner su tuit, me lo pensé dos segundos. O menos.
Me apuntaría a #Dressember si tuviera vestidos suficientes… ¿Habéis visto la iniciativa?
— Alicia Méndez (@srtalicia) diciembre 6, 2014
¿Por qué?
Yo llevo muchos vestidos, y faldas, y tacones. Me gusta.
Y no por ello me siento menos feminista o menos profesional o menos defensora de las desigualdades sociales. Y sí, estoy completamente en contra del sexismo trasnochado que me dice que no puedo hacerlo, porque son ataduras educacionales, porque me degradan como mujer, porque muestran solo una parte de mí: el objeto.
Pues no estoy de acuerdo. Tengo derecho a ponerme lo que me dé la gana sin que nadie me juzgue por mi condición sexual o rebaje mi dignidad como mujer.
Tengo derecho a llevar todas las minifaldas que quiera sin tener que aguantar a babosos en entornos profesionales haciendo algún tipo de comentario desagradable sobre mi atuendo. Sí, desagradable, porque está fuera de lugar en ese contexto. Y porque yo no me visto para ti, bonito, ni para alegrarte la vista ni el día. Lo hago porque quiero y tú no puedes abusar de ello. No tienes derecho a coartar mi libertad ni a hacerme sentir de menos porque no voy vestida como un hombre.
Y esto no es nada. Todas tenemos miles de historias con taxistas, compañeros de trabajo, jefes, amigos, parejas… Y eso sin contar las agresiones sexuales con las que han tenido que vivir cientos de miles de mujeres en el mundo, agachando la cabeza porque «iban vestidas como putas».
Una vez, me dijeron tras una reunión: «Has estado brillante. Solo te ha faltado sonreír». A un hombre nadie jamás se lo hubiera dicho. Se habrían quedado en «brillante».
Soy muy mujer, soy muy feminista y soy muy femenina.
Por la dignidad y los derechos de la mujer, porque nadie se sienta en el derecho de agredirnos por nuestra femineidad, hemos creado un equipo en España –Spanish Girlvolution– para dar visibilidad a esta iniciativa global y nos hemos abierto un perfil por si alguien quisiera donar durante la campaña: http://support.dressemberfoundation.org/inmaferragud.
Si no lo hacéis, da igual. Esto no es una subasta. Es una forma de llamar la atención sobre algo que nos preocupa y sobre lo que hay que ocuparse ya.
Por eso, hago #Dressember.
Totalmente de acuerdo, me encanta ser mujer, soy feminista y también me gusta ser femenina en ocasiones, y ponerme sexy no me parece ir provocando, simplemente me visto como me apetece por y para mí. Creo que cada uno decide lo que quiere enseñar y nadie debería juzgarlo, igual que uno se pinta el pelo de azul, ¿Y si eso se empezara a considerar sexy? supongo que esta campaña ya pasó, sino me apuntaría pero ya :)